Se enfrentaban Syracuse y Connecticut en los cuartos de final de la 'Big East' de la NCAA en un encuentro que se decantó a favor de los primeros 127-117.
El partido no tendría más historia que la haber sido un festival ofensivo, si no llega a ser porque el choque se decidió tras la friolera de... ¡seis prórrogas!
Este histórico choque duró 3 horas y 46 minutos, acabó casi a la 01:30 de la madrugada, ocho jugadores fueron eliminados por faltas personales y seis lograron sendos 'dobles-dobles'.
Jonny Flynn, base de Syracuse, fue el mejor con 34 puntos y 11 asistencias... ¡en 67 minutos de juego!
"No tengo palabras", dijo Jim Boeheim, entrenador de Syracuse y uno de los técnicos más reputados de Estados Unidos.
Fuente: Marca.com
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